Fue una locura. Hace una semana, estaba yendo al salón Augustus, vestido para la ocasión, preparado psicológicamente para disfrutar (ponele) y a la vez entregado, como se dice en estos casos “lo hecho, hecho esta”.
Ingreso al salón, barras armadas, fraperas sudadas, luces violetas, música amena y caballetes listos. Todo en su lugar, era old trafford, “el teatro de los sueños”, solo restaban minutos para que arranque, «vamos que falta poco» se encuchaba en mi interior, a modo arenga de vestuario. ¿Y las sommeliers? Pequeño detalle, ¿no? Todo muy lindo, pero en una feria de vinos y arte, si no tenemos quien maneje el pincel, no hay obra. Y sin sommelier, solo somos despachantes de vino. Y por ahí se escucha, ¡ya esta! Están bien, consiguieron combustible y están a 5 minutos, pasando Melincue. Se habían quedado sin nafta! Por suerte y gracias a Dios, la energía o la fuerza mayor que se crea, Paloma, Vicky y Celi llegaron sanas y salvas, (y queda la anécdota).
Resuelto el inconveniente anterior, arrancamos un poquito mas tarde de lo planificado, y sin querer queriendo, generamos expectativa en la puerta. La gente comenzó a ingresar, le entregábamos la copa y a disfrutar. Al principio arranco medio “timida” la cosa, los artistas pintando en el centro del salón, las barras con los vinos a temperatura sugerida pidiendo pista y la gente parada con copa en mano mirando el lugar, investigando, rigida, con cara de sospecha, no lo se, me tuve que poner el traje de Roberto Galan y salir a unir las partes, asi que tome entre mis manos un chardonnay de Caelum y servi uno a uno, explicando el modo operandi, se descontracturo todo y se largo. Los invitados a probar, opinar, consultar, charlar y los pintores aflojaron las muñercas y comenzo la magia. Y vaya tiraron magia, harry poter un poroto, eran los cuatro fantásticos haciendo lo que saben y con cara de disfrute, de quiero que esto dure para siempre. Aprovecho este párrafo para agradecerles, por su disposición, el aporte y, lo mas importante, la buena onda.
A Maria Elena se la veía muy contenta, como en un cumple, su cumple, la sonrisa no le entraba en el rostro. Es muy querida, todo el mundo habla muy bien de ella, es una eminencia y esa noche, contagiaba alegría, la misma se pudo ver reflejada en su obra, “CONSTANTINO”. Marcelo, conocido como “Corto Scazzina” fue mi profesor de dibujo en la secundaria, y como dibujando soy un desastre, asi y todo, me hizo hacer cosas para llegar al 6. Se mando una obra tremenda, “PANDEMIA DE CORONAVINO”
y lo mas emotivo, es que pudo pintar en familia junto a Sam, creo que como padre eso cruza las barreras de cualquier tipo de emoción generado por una obra. Anabel, la joya elortondense, es una niña de veintipico con mucho potencial, por sus trabajos e intervenciones y con su zurda mágica realizo la obra que tiulo “DIONISIO”. Por ultimo, y no menos importante, Pablo, un artista importado de Rosario (Pero ya es nuestro), con una técnica simil borra de vino y con el lienzo acostado pinto al “rompe huesos» (según Tacho Tasselo), al campeón mundial elortondonde, “EL LITA”. El dato de color, esa obra fue vendida esa noche. Las otras desconozco si están o no a la venta, cualquier cosa avisen y les paso el contacto. Lo que puedo asegurar, es que algún fin de semana del 2021, tendremos los cuadros expuestos en el local.
Entre copas y pinceles, se paso la noche. Se notaba un clima hermoso, difícil de describir con palabras. Preguntaban sobre las obras, cataban vinos, saboreaban empandas de tempura y limon, y mucha charla con el de al lado, y asi la velada se nos paso volando.
En una época en la que vivimos acelerados, apurados y quejosos. Esa noche, aunque sea por un puñado de horas, se freno el mundo, para que bajemos un cambio, despejemos la cabeza y disfrutemos.
Y al final, en el fin de fiesta, todos alegres, pedían repetir. Primero, terminemos el año, en el 2022, seguramente realizaremos la 2da Feria Itinerante de Vino & Arte, pero disfrutemos de esta, que si bien ya paso, todavía hay mucho para recordar y alegrarse
Parrafo a parte para DJ Maxi, que tiro fantasias por los parlantes. Un crack.
Me despido agradeciendo a todos, a los chicos del salón, a los artistas, a la cocina, sonido e iluminación, a los somellier y a la ABA (mi vieja) por quedarse cuidando a Leon (mi hijo!) y a Sole (la mama) por el aguante y el apoyo.
GRACIAS.
Y si hoy no los veo: “ que tengan buenos días, buenas tardes, buenas noches”.
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Mariano Fabre